¿Cuáles son los cuidados ideales para Sansevieria Golden en interiores?
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La sansevieria golden es una planta resistente y de bajo mantenimiento que se adapta muy bien a las condiciones interiores. A continuación, se detallan los cuidados esenciales para asegurar su buen desarrollo en espacios interiores:
1. Iluminación adecuada
La sansevieria golden se adapta a diferentes niveles de luz, pero prefiere luz indirecta brillante para crecer de manera óptima. Puede tolerar condiciones de baja luminosidad, pero la falta de luz directa o indirecta podría ralentizar su crecimiento y afectar la coloración de sus hojas. Si la planta recibe demasiada luz directa, especialmente a través de ventanas con sol fuerte, podría sufrir quemaduras en sus hojas.
2. Riego moderado
Una de las principales características de la sansevieria golden es su resistencia a la sequía. Por ello, se debe regar con moderación, permitiendo que el sustrato se seque completamente entre riegos. Durante el invierno, el riego debe reducirse aún más, ya que la planta entra en una fase de reposo. Es importante evitar el encharcamiento, ya que el exceso de agua puede causar pudrición en las raíces.
3. Sustrato bien drenado
El sustrato ideal para la sansevieria golden debe ser ligero, aireado y bien drenado. Se recomienda una mezcla para suculentas o cactáceas, que favorezca el paso del agua y evite que las raíces se queden sumergidas en agua por períodos prolongados. Un buen drenaje es crucial para mantener la salud de la planta.
4. Temperatura y humedad
La sansevieria golden se adapta bien a las temperaturas típicas de los interiores, entre 18°C y 24°C. No tolera temperaturas muy frías, por lo que debe mantenerse alejada de corrientes de aire frío o lugares donde la temperatura baje por debajo de los 10°C. En cuanto a la humedad, la sansevieria golden no es exigente y puede prosperar en ambientes secos, como los interiores de muchas viviendas.
5. Fertilización ocasional
La fertilización de la sansevieria golden no es necesaria en exceso, pero durante la temporada de crecimiento (primavera y verano) se puede aplicar un fertilizante balanceado para suculentas diluido en agua, aproximadamente una vez al mes. En otoño e invierno, la planta entra en un periodo de descanso, por lo que no es necesario fertilizarla.